El entorno natural del municipio norteño de La Oliva es, sencillamente, espectacular. Dunas de arena, volcanes, malpaíses, costa salvaje y recóndita… Buena parte de estas maravillas de la naturaleza están algo escondidas, alejadas de las carreteras de asfalto y de los núcleos de población, por lo que te proponemos adentrarte en el paisaje para vivirlo desde dentro de la más saludable y respetuosa de las maneras: andando.
Sendero Local Calderón Hondo – Lajares
Es un pequeño sendero que transcurre entre volcanes y campos de coladas volcánicas (malpaís) que une la localidad de Lajares con la cima del volcán Calderón Hondo y vuelve al punto de inicio. Una opción sencilla para un paseo a pie y muy recomendable por la belleza del entorno y las extraordinarias vistas que ofrece la cima sobre el cráter de 70m de profundidad de Calderón Hondo, el entorno volcánico característico de Fuerteventura y la isla vecina de Lanzarote. Un paseo de ida y vuelta de 3,5 kilómetros de longitud que se recorren en aproximadamente una hora y media.
Sendero Tindaya – El Cotillo
Este sendero de unos 15 km comienza en el pueblo de Tindaya, transcurre por el paisaje interior hasta la playa de Esquinzo y continúa en paralelo a la costa hasta el pueblo de El Cotillo, en un recorrido de aproximadamente 4 horas y media.
Por el camino con muchos los atractivos, naturales y culturas, que se van descubriendo: la mágica Montaña de Tindaya, hornos de cal, restos de construcciones aborígenes, el sobrecogedor paisaje árido típico de Fuerteventura y esta zona, pajarillos… Al llegar a la desembocadura del barranco de Esquinzo, una impresionante playa salvaje nos da la bienvenida, como preludio del paisaje que nos espera por toda la costa hasta El Cotillo: acantilados, barrancos que desembocan en playas recónditas y vírgenes, bravo mar del norte,… así hasta el pueblo de El Cotillo, donde nos saluda al entrar el castillo de El Tostón, la impresionante torre que desde principios del siglo XVIII defendía el muelle y el pueblo de los ataques piratas.
Sendero de Gran Recorrido GR 131
La estrella del norte para caminantes es el tramo del sendero de Gran Recorrido, el GR 131, que en sus tres primeras etapas (un tercio del total) atraviesa el municipio de La Oliva de norte a sur, antes de continuar su trazado a lo largo de toda Fuerteventura hasta la Punta de Jandía, en seis etapas más.
Etapa 1: Isla de Lobos
La primera etapa del sendero, de 3,5 km, transcurre íntegramente en el Islote de Lobos, al que hay que llegar en barco desde el muelle de Corralejo. Partiendo del faro de Martiño atraviesa el islote hasta el muelle, en un recorrido sin apenas desnivel que te va descubriendo un montón de atractivos: formaciones volcánicas, vistas al Atlántico, Lanzarote y Fuerteventura, una playa de ensueño, históricas salinas… Para ver la pequeña isla en su totalidad, te recomendamos hacer el camino inicial hasta el faro por el otro lado, pasando por El Puertito con sus lagunas naturales y por saladares y charcas donde habitan numerosas aves y plantas endémicas, como la peculiar siempreviva. La isla de Lobos es en sí misma un tesoro en miniatura de visita obligada.
Etapa 2: Corralejo – La Oliva
Desde Corralejo parte la etapa número dos, que tras un recorrido de 25,9km sin apenas desnivel que transcurre mayormente entre volcanes y malpaíses con vistas sobre el océano y Lanzarote, se adentra en el pueblo de La Oliva, uno de los lugares con más historia de la isla de Fuerteventura.
Etapa 3: La Oliva – Tefía
La tercera y última etapa que transcurre por el municipio de La Oliva de las nueve que atraviesan la isla entera, parte desde La Oliva y llega hasta la localidad de Tefía, en un recorrido de 16,8km con un desnivel de subida de 242m. Los principales encantos de la ruta son la Montaña de Tindaya, la Montaña Quemada con la escultura de Miguel de Unamuno en homenaje a su destierro en la isla y las diversas muestras de la vida en el entorno rural majorero.
Estos son algunos senderos, pero hay muchas más posibilidades de descubrir las maravillas de La Oliva a pie a través de innumerables caminos por los que perderte y adentrarte en su parte más desierta y natural. Consulta aquí la guía de senderos de La Oliva.
Recuerda siempre no abandonar los caminos habilitados, pues todo este extraordinario paisaje que a simple vista puede parecer desierto, es en realidad el hogar de una riquísima y peculiar variedad de especies vegetales y animales que tenemos que cuidar.