«El turista que viene a La Oliva quiere hacer excursiones, deportes acuáticos, actividades en el interior,… y eso es lo que queremos darle»

ENTREVISTA a Celino Marcelino Umpiérrez, Concejal de Turismo de La Oliva por Janey Castañeyra

¿Qué balance hace el turismo de La Oliva tras casi dos años de pandemia?

Hemos tenido dos veranos buenos, yo creo que con la mejor ocupación turística de Canarias. No solamente gracias a los turistas convencionales, que teniendo la posibilidad de coger un vuelo a cualquier lugar, han venido a Fuerteventura y han elegido La Oliva, sino también por esos nómadas digitales. La Oliva tiene un número importante de camas de viviendas vacacionales y han sido ocupadas durante toda la pandemia, especialmente durante el verano, por estos chicos y chicas que se han venido a trabajar, a disfrutar y a descubrir las experiencias que puede dar nuestro municipio.

Al mismo tiempo, las consecuencias son bastante serias y difíciles de superar. Algunos establecimientos y locales han cerrado sus puertas para siempre. Aunque también es cierto que el municipio ha sido quizás de los menos dañados, como digo, por esa elevada ocupación de teletrabajadores y del turismo nacional e interinsular.

¿Y en positivo, para qué nos ha servido?

Yo creo que hemos aprovechado el año y medio de la pandemia para pintar y adecentar la casa. Y cuando digo casa, hablo del municipio. Creo que se ha avanzado muchísimo en limpieza, en accesibilidad, en mejorar y dotar las playas de toda la infraestructura de la que era carente… Hemos recuperado la Bandera Azul, algo fundamental, sobre todo porque nos obliga a fiscalizar nuestros propios servicios y que sigan estando presentes para nuestros turistas. Ahora tenemos un municipio más preparado, y tenemos una demanda importantísima de nuevos mercados en los que, sí o sí, debemos estar presentes.

¿En qué ha cambiado el turismo, cómo nos hemos adaptado?

Justo después de la declaración del Estado de Alarma, nosotros ya empezamos una campaña dedicada al turismo canario y al turismo nacional. Aquello dio sus frutos, y no ha bajado mucho la ocupación prácticamente hasta el día de hoy. Yo creo que ya se están viendo cambios en todos los establecimientos turísticos y en las zonas comerciales. La pandemia va a dejar huella, y esto, tristemente, no se ha acabado.

Los hoteles también se están adaptando. Muchos de ellos han puesto ya espacios de coworking. El turismo de trabajo es un nuevo sector que ha venido para quedarse, como se suele decir. Al turista convencional, que viene a través de operadores turísticos, que viene para estar en la playa, por supuesto que lo vamos a seguir teniendo, pero muchos entran también con la intención de trabajar y disfrutar del municipio.

¿Desde el área de Turismo que usted gestiona, que novedades destacaría?

Estamos trabajando mucho la parte del interior. El turista que viene aquí generalmente busca un espacio fuera del hotel. Salir con el coche, irse a Villaverde a La Oliva, buscar lugares emblemáticos, zonas históricas del municipio… Entonces, estamos preparando un proyecto que se llama La Oliva Capital Cultural, hemos terminado una Guía de Playas extraordinaria, que incluso me han felicitado otros municipios y creo que se van a embarcar también en el proyecto. Porque es importante definir las playas, el uso de las playas, y esta es una guía completísima que hemos presentado hace unos meses, y que seguiremos llevando a las ferias en las que estamos presentes.

¿Y cuáles serán las apuestas para el año que viene?

Pues seguimos trabajando en torno a la gastronomía, que es algo fundamental. Estamos trabajando a nivel profesional, de formación, e incluso hablamos de espacios para dar esa formación, con el acondicionamiento del antiguo mercado de Corralejo, con 80 plazas para dar clases y formación, no solamente para nuestros profesionales, sino también para nuestros jóvenes.

También dedicaremos esfuerzos a los senderos y a la naturaleza. Tenemos preparada una nueva guía con 30 rutas de senderismo en el municipio y esperamos seguir adelante con la Ruta del Agua, dentro del proyecto EcoTur, finalizadas ya las obras en los aljibes Veneno y Redondo. Yo creo que este municipio abre sus puertas incluso con mejor cara que con la que comenzamos la pandemia.

¿Qué expectativas tenemos para las siguientes temporadas?

En invierno sabemos que se ha complicado con el asunto de la nueva variante y con las restricciones. Sin embargo, a partir del verano, hay un incremento brutal por parte de todos los operadores turísticos y se manejan unas cifras de incrementos de entre el 15% y el 20% de plazas aéreas, de reservas y de ocupación turística en el municipio de La Oliva.

Vamos a relajarnos un poco. En su opinión personal, ¿Playas de Jandía o Playas de La Oliva?

A mí me gusta pasearme por los pueblos, por las calles, disfrutar de la gastronomía, de la cocina popular, ver ambiente en las calles, en los comercios… Ahí hay una oferta importante en La Oliva, que desde luego es un municipio atractivo y divertido que te puede ofrecer de todo. Estamos próximos al aeropuerto y tenemos una situación estratégica brillante, al lado de Lanzarote e Islas de Lobos.

En los años 80, el alemán era el turismo mayoritario en Corralejo, y sin embargo se han ido inclinando hacia el sur, porque es un turista menos activo, digamos, que quiere más hotel, playa y sol. Eso aquí lo tenemos también, pero el perfil nuestro es un turista que no viene a estar tumbado en una hamaca, por decirlo de una manera. Puede hacerlo, por supuesto, pero también quieren hacer excursiones, actividades acuáticas, actividades en el interior, conocer un legado histórico importante y, sobre todo, también disfrutar de la gastronomía y la cocina popular del municipio. ¿Qué quiere que le diga? No es porque sea de aquí… pero yo me quedo con el norte.